Media Maratón de Talavera de la Reina 16/09/2023
Me enteré de esta carrera un mes antes del evento. No le hice mucho caso ,ya que tenía en mente correr la Media Maratón de San Sebastián porque me había tocado un dorsal gratis con Zurich Seguros. Pero debido a que dejé esa media por falta de ganas de ese viaje, comencé a buscar alternativas.
Una alternativa era la Media Maratón de Ciudad Real, el 22 de octubre. La otra, Talavera. Una con viaje en familia, Talavera viaje en coche solo por la mañana, carrera y vuelta.
Pues con esta me quedé, me tocó madrugón y viaje en coche casi dormido. Entre que era de noche, había poco tráfico y que había dormido poco la noche anterior… se me hizo el viaje largo, largo, largo.
El objetivo es ir tranquilo y terminar en una hora y media.
Por suerte, al ser una carrera con poca afluencia, llego directamente en coche y aparco justo al lado de la salida. Todo un lujo.
De ahí a recoger el dorsal, comer un plátano, dar una vuelta, ir al servicio y calentar 10 minutos para no salir muy frío, que aquí hace bastante fresquete.
Me coloco en la salida al lado del polideportivo de la ciudad y salimos en tromba para calentar motores.
Desde el primer momento veo que voy deprisa, pero el cuerpo me pide un poco de marcha. Decido no apretar al comienzo pero me noto aceleradas las piernas. Por no discutir a esas horas, cambio la mentalidad y vamos por sensaciones, a ver qué pasa. Si tengo que bajar más a delante el ritmo, lo bajaré y me adapto.
Los primeros kilómetros los corro a menos de 4 min/km. Las sensaciones son muy buenas y noto como si las piernas flotaran. No sé cuanto va a durar esto pero de momento me convence.
Al poco de pasar el kilómetro 2, cruzamos un puente y nos dirigimos a otro para pasar dos veces el río. Luego corremos por carretera al lado del margen. Esta parte es muy agradable.
Sobre el kilómetro cinco entramos en interior. La carrera no es bonita pero hay animación en casi todo el recorrido. Callejeamos un poco aunque sin muchas curvas, o al menos esa es la sensación.
Sigo a una media de cuatro minutos por kilómetro y , la verdad, que estoy esperando a que las piernas se empiecen a quejar y a cansarse.
Así llego a la mitad del recorrido y al punto de inicio, por lo que queda una segunda vuelta. Ya me sé el recorrido y voy a lo fácil, siempre pensando cuándo me dirá el cuerpo que pare un poco.
La carrera es muy plana, sin apenas desnivel y fácil de correr.
La segunda vez que paso por los puentes se hace mucho más ameno y agradable. Es parte cerca de campo.
Lo bueno es que voy adelantando a todos los corredores. Bueno, a casi todos, porque hay uno que me adelantó. Uno en toda la carrera. Y esto da ánimo para ir manteniendo el ritmo. Da la sensación de ir mejorando la marca pero, más bien son los corredores los que van disminuyendo. Las sensaciones son muy, pero que muy buenas.
No me da ni por calcular el tiempo en que puedo acabar. Solo pienso en disfrutar el recorrido y del ritmo que voy llevando en cada momento.
Así aguanto hasta el final. Sin apretar pero manteniendo el ritmo sin bajarlo. Adelantando en todo momento a corredores y con la sonrisa en la boca.
Cuando nos vamos acercando a la meta, veo que hay tres corredores cerca que me gustaría adelantar. Esto si ya es un poco de ambición y de apretar los dientes. Entre otras cosas, porque veo que puedo y me quiero medir.
No los tengo cerca, pero me voy ganando metros poco a poco. Al llegar al parque del Alcalde Pablo Tello, los tengo a pocos metros, pero queda menos de un kilómetro para llegar. Aprieto y acabo adelantando a los tres corredores, entre ellos, la segunda mujer. Este último kilómetro lo he hecho a 3’33″… una barbaridad para como he corrido y no entrenado para esta media.
Llego poco después de la primera corredora. Muy feliz y orgulloso del tiempo realizado: 1:22:30.
Estiro un poco, bebo un isotónico, como dátiles e higos, me cambio y salgo para Madrid.
Objetivo más que cumplido.